Cuando Milo entra en esa cabina mágica que lo transporta a un mundo tan distinto y a la vez tan parecido al nuestro, empieza a tener experiencias sorprendentes. De pronto, ese tímido muchachito de diez años, desganado y sin interés por nada, que piensa que «el proceso de adquisición de conocimientos es el mayor derroche de tiempo» imaginable, inicia un insólito viaje a través del Reino del Conocimiento. Y entonces descubre que la vida y la razón pueden ser tan estimulantes como no hubiera podido imaginarlo ni en sus más locos sueños infantiles.
Atrévete a entrar en esta cabina mágica, donde la poesía navega por un mundo imaginario,
la lógica y la ilógica se confunden, y las palabras y los números discuten por su primacía.
La diversión está asegurada.